sábado, 26 de abril de 2014

Solomillo con piña

Una receta muy sencilla, con la que sorprenderás a tus invitados menos tradicionales con esta mezcla de solomillo con piña.

Ingredientes

1 solomillo de cerdo
lonchas de panceta cocida
1 lata de piña al natural
vino blanco
sal
pimienta negra
aceite


Comenzamos limpiando bien el solomillo de su grasa con ayuda de unas tijeras o de un cuchillo afilado.

Lo partimos en trozos y los aplastamos un poco presionando con la mano.

Doramos los trozos en una sartén con un poco de aceite.


Les echamos un poco de pimienta y los envolvemos con una loncha de panceta sin corteza.

Los colocamos en una bandeja de horno y le añadimos las rodajas de piña cortadas por la mitad. Regamos un con un poco de su propio jugo y con un chorrito de vino blanco.

Introducimos la fuente en el horno a unos 200 grados hasta que se dore la panceta y...

¡A comeer!

viernes, 25 de abril de 2014

Pizza casera

Muchos fines de semana preparo esta pizza que, además de estar buenísima, sirve para aprovechar los restos que van quedando por la nevera.

Además, más de una vez me ha sacado de un apuro, ya que se puede hacer con los ingredientes que tengas por casa, sin necesidad de ir a la compra.
Empecemos por lo básico y por lo que es común a todas mis pizzas: la masa.

INGREDIENTES PARA LA MASA

200 gramos de harina
Un sobre de levadura de panadería o medio bloque de levadura fresca
Una cucharada de aceite
Una pizca de sal
Un cuarto de vaso de agua templada


Comenzamos echando los ingredientes en una ensaladera: la harina, la sal en un lado para que no toque demasiado la levadura, el sobre de levadura y el aceite. Se mezcla todo bien con ayuda de una cuchara y se va añadiendo el agua poco a poco. La mezcla debe tener un aspecto en el que sus componentes se empiecen a unir pero que no sea tan pegajosa como para que no se pueda manipular.
Se esparce un poco de harina en la mesa de trabajo y se echa la masa. Se amasa hasta que quede una bola homogénea y se añade más harina o más agua hasta que la consistencia no se pegue en las manos pero que dé la impresión de que con una gota más de líquido comenzaría a pegarse.
Volvemos a echar la bola a la ensaladera y lo tapamos con un paño limpio hasta que duplique su tamaño




A continuación se extiende la masa con ayuda de un rodillo y se coloca en la bandeja del horno que habremos cubierto antes con papel vegetal. Se puede dejar reposar otro poco si nos gusta la masa gordita.


Un truco para que la masa quede como la de Telepizza, es añadir ahora un poco de pan rayado.

Después cubrimos con tomate y orégano al gusto.


Se parten los ingredientes que queramos añadir y se colocan repartiéndolos bien por toda la superficie. En esta ocasión yo coloqué champiñones y calabacín y lo cubrí todo con queso. Podemos sustituir o combinar estos ingredientes con todo lo que se os ocurra: jamón york, atún, chorizo, salchichón, pollo asado, salchichas, pisto, tomate cherry, queso de cabra, etc.



Introducimos la pizza ya montada en el horno precalentado a máxima potencia durante 20 minutos, dejando los 5 últimos minutos de éstos con calor sólo por abajo.

Y este es el resultado:

Además, en esta pizza añadí anchoas y un chorrito de salsa barbacoa. Las anchoas no deben introducirse en el horno pues con el calor se deshacen.

Aprovechad para poner en marcha vuestra creatividad, sacad el chef que lleváis dentro y combinar todo tipo de ingredientes.

¡Buen provecho!

jueves, 24 de abril de 2014

¿Nos endulzamos?

A todos nos encanta el dulce, bueno por lo menos a mi sí, pero se ha hablado tanto y tan mal del azúcar blanco refinado que ya son varias las alternativas que voy probando sin mucho éxito.


En primer lugar me decanté por la sacarina, por eso de que no tiene calorías y es muy cómoda de utilizar. Además el sabor me gusta. Pero luego te pones a leer sobre ella y te enteras de lo malísima que es para nuestra salud, del efecto nocivo del aspartamo y sus primos-hermanos, etc. Mi formato preferido es en pastillitas, aunque también he probado en polvo y en líquido

Mi segunda opción fue el azúcar moreno, mucho más saludable que el azúcar blanco, pero con el inconveniente de que para conseguir el mismo dulzor, necesito echar mucha más cantidad, de modo que seguí buscando. Lo sigo utilizando para la repostería.

También lo he intentado con la miel, pero el sabor del café con miel no me convence demasiado y es para lo que normalmente utilizo todos los endulzantes.

Últimamente he utilizado los sobrecitos de Stevia de la marca blanca de Eroski y también los de Azucarera. En los primeros viene menos cantidad que en los de Truvía pero me gusta la forma que tienen de endulzar mi café y lo cómodos que son. Pero como siempre, si te paras a mirar los ingredientes descubres que ambos llevan una cantidad ínfima de hojas de stevia, que es lo sano y otro montón de componentes añadidos que tienen pinta de ser igual de malos que la sacarina de toda la vida. La ventaja que tiene es que aporta cero calorías.

Y mi último intento ha sido el sirope de Agave, un azúcar natural que se extrae de la savia de una planta mexicana, que sí que aporta calorías (menos que el azúcar blanco), posee un sabor neutro y un bajo índice glucémico, por lo que es una buena alternativa para las personas con diabetes. El inconveniente que le encuentro es que al ser en formato líquido no me aclaro con las dosis y nunca acierto (o demasiado dulce, o demasiado amargo).

Y de momento aquí acabo con mi repaso de la búsqueda del endulzante perfecto, aunque seguro que seguiré probando alternativas hasta encontrar alguna que me convenza.

Y vosotros..
¿Qué utilizáis para endulzaros la vida?
¿Me hacéis alguna recomendación?


martes, 22 de abril de 2014

Tarta Guinness

Una tarta con la que acertarás seguro, ya que a los más golosos les encantará, los amantes de la cerveza no podrán resistirse a probarla y por su textura diferente y sabor inesperado gusta a todo el mundo.

Además cunde muchísimo. La llevé a una cena de 30 personas y todos comimos e incluso sobró un poco (claro, que antes habíamos cenado muchísimo).

INGREDIENTES

250 ml de cerveza Guinness
250 gr de mantequilla
75 gr de cacao en polvo
400 gr de azúcar
250 gr de harina
1 cucharadita de azúcar avainillado o esencia de vainilla
2 cucharaditas y media de bicarbonato
140 ml de bata líquida 35% MG
2 huevos

Para el frosting

300 gr de queso de untar
150 gr de azúcar glass
360 ml de nata líquida 35% MG (para montar)

PREPARACIÓN

Poner en un cazo al fuego, añadir la cerveza y calentar sin que llegue a hervir. Cuando esté bien caliente se añade la mantequilla hasta que se disuelva. Reservamos.
En un bol grande se mezclan los ingredientes secos: el caco, azúcar, harina, la cucharadita de azúcar avainillado, las dos cucharaditas y media de bicarbonato y se mezcla todo bien con unas varillas.
En otro bol se cha 140 ml de nata líquida y los dos huevos. Se mezcla todo bien hasta obtener una crema homogénea. Agregamos la cerveza con la mantequilla que ya se habrá enfriado y se mezcla todo bien.
Incorporar esta mezcla al bol con los ingredientes secos y con unas varillas se mezcla.
Con un trozo de mantequilla, engrasar el fondo y las paredes de un molde redondo desmontable, espolvorear con harina y mover para cubrir todo el molde. Echar la mezcla y meter en el horno precalentado a 180 grados durante 50 minutos. Una vez hecho sacar y dejar enfriar.
Para hacer el frosting, echar en un bol el queso de untar, el azúcar glass y con la ayuda de unas varillas se mezcla todo bien.
Montar los 360 ml de nata e incorporarla a la mezcla de queso con azúcar, removiendo con cuidado para que no se baje la nata.
Cuando la tarta esté fría se cubre con el frosting ayudándonos de una cuchara y haciendo que la superficie quede bonita, dejando caer un poco por los bordes. No importa si sobra, pues se puede comer solo de lo bueno que está.
Es recomendable conservarla en la nevera durante un día, puesto que la textura de la tarta cambia, aunque se puede consumir inmediatamente.